Posts

Mi clan de duendecitos. | Iniciativa Nº5

12 comments·0 reblogs
lilianajimenez
69
0 views
·
min-read

Buen día. Feliz martes, espero que estén muy bien.

El entusiasmo y la diversión forman parte de mi vida, son parte de mí. Y hoy quiero compartirles un poco de esos episodios que me acompañan casi a diario, en los que mi clan de duendecitos hace de las suyas.

@iriswrite, nos invita a través de una iniciativa (esta es la quinta que nos regala) a compartir aquellas anécdotas o situaciones en las que el despiste o la indiscreción nos hizo "meter la pata" o quedar mal parados. Lo que llaman los mexicanos; tener un oso. De esas tengo yo uff, para llenar un libro, pero hoy, solo compartiré las que me den menos vergüenza, ja, ja, ja, ja.

Iris le atribuye estas alocadas reacciones de nuestro cerebro a pequeños duendes, que muy probablemente están dentro de nosotros y se diviertan viendo cómo nos equivocamos.

Y yo estoy totalmente de acuerdo, y es que hasta me los imagino muertos de risa, con cada metida de pata que nos inducen a cometer. Lo sé, qué avispada soy echándole la culpa a unos duendecitos para no asumir mis propias locuras y ocurrencias, ja ,ja ,ja ,ja.

Mi defensa antes de comenzar:

Es que mi mamá se lleva el premio a la más ocurrente y sucedida del mundo mundial. Y ¿cómo no iba yo a salir así? Son tantas, pero tantas las anécdotas que atesoro de mi mamá, perdiéndose, diciendo algo incoherente, o imprudente, despistándose, que creo que voy a comenzar a escribirlas, para que no se me olvide. Te amo, mami.

Bueno, ahí les voy:

Mi clan de duendecitos:

En todo mi cuerpo habitan unos pequeños personajes que voy a llamar duendecitos, gracias a Iris. Los hay, de todo tipo, trabajadores, emprendedores, creativos, emotivos, románticos y paren ustedes de contar. Pero hay un grupito que es demasiado abusador y le encanta disfrutar cuando me hacen equivocar, ser imprudente o despistada. Desde pequeña vivo sus ataques y gracias a mi buen humor, los he aceptado y trato de llevármela bien con ellos. Porque no me queda de otra, esos no se van a mudar a otro cuerpo, les gusta estar en mí.

Muchas veces me hacen confundir a las personas. Y sobre todo a mi esposo, ¿Pueden creer que confunda a mi esposo? Pues sí, el amor de mi vida, es muy alto, fornido y pelón, es decir, calvito. Y con ese porte hay muchos, peros muchos hombres por ahí (Esa es mi humilde defensa) Entonces, me ha pasado que vamos de compras y nos separamos en algún pasillo, calle o venga usted a saber en dónde y por qué, y voy yo y creo, que cualquier calvo, alto y que lleve una camisa del mismo color, ya es mi esposo.

image.png
Fuente

Me les he acercado preguntando, por ejemplo: Será que me compro este desodorante o aquel otro. O diciendo: Papi, ya me dio hambre. ¿Nos vamos? o la peor; ¿Qué haces viendo pañales desechables si ya no necesitamos eso? Las víctimas de mis despistes casi siempre se quedan paralizados mirándome y, cuando me doy cuenta de que no se trata de mi esposo, me doy media vuelta y ahí los dejo, ni siquiera un: disculpe, me equivoqué. Me da tanta vergüenza que solo me dan las piernas para irme corriendo.

Otras veces me hacen hablar más de la cuenta. Una vez que estaba conversando con un primo y su novia, no sé de dónde salió el tema, pero comenzamos a hablar del maquillaje y yo no sé de donde me inspiré (de los duendes obviamente fueron ellos) pero comencé a despotricar de las mujeres que se maquillan hasta más no poder y se dibujan unas cejas que parecen hechas con marcador del más grueso, además le sumé que no entendía por qué se operaban y se mandaban a poner las tetas más y más grandes y bla, y bla, y mi primo me daba con el pie por debajo de la mesa y yo no paraba, es más le decía, ¿Pero por qué me das en el pie? Y seguía hablando.

Resulta que su novia estaba recién operada. Se había mandado a colocar unas cuantas tallas más de senos, y es de las que no sale a la calle si no se hecha medio kilo de base y maquillaje en la cara. Para colmo, voy y le suelto a mi primo (obvio yo no sabía estas curiosidades de su novia) "Primo, quédate con quien, cuando llueva, todavía tenga cara" ¡Oh, Dios!

image.png
Fuerte

Aquí cortan muy seguido la electricidad, y ya estamos predispuestos. Una vez estábamos en una fiesta, ya era tarde y tenía sueño, entonces me froté los ojos y en ese pequeño instante, mientras cerraba y volvía a abrir los ojos, dije: "Ayy, se fue la luz" abrí los ojos y todos me miraban con cara de ¿Qué? Ja, ja, ja, ja. Mi cerebro, cuando quedó a oscuras, pensó que se había ido la luz.

Una vez (este año creo) entré al salón de clases de mi hija y le hablé a la maestra, le pregunté si ese día tendrían la evaluación y que cómo iba mi niña en su desenvolvimiento académico. La mujer me contestó; "No sé si hoy es la evaluación, estoy esperando a la maestra para preguntarle, ahí aprovechas y le preguntas sobre tu niña, yo soy la mamá de fulanita" Menos mal, fue amable y entendió mi despiste. En mi defensa, es igualita a la maestra.

Y dígame las veces que me he caído, antes daba risa, ahora nos asustamos. Pero de caídas en las que me desparramo por el suelo, en los sitios más concurridos, tengo un máster.

Y así son muchas las cosas que me van pasando, tantas que se haría muy largo el post si las cuento. Ja, ja, ja, ja.

Gracias @iriswrite, por esta propuesta tan fresca y divertida que nos hace ver las cosas que nos pasan, desde otro punto de vista.

Contenido 100% original. Sin uso de IA.
El 15% de las recompensas obtenidas en esta publicación serán dirigidas a la cuenta de la comunidad @holos&lotus